miércoles, 22 de diciembre de 2010

Pensarrea

Pensarrea: Síntoma o fenómeno morboso que consiste en evacuaciones de mente líquidas y frecuentes.
Pensarrea:  Dícese de la incontrolable expulsión de pensamientos que tiene lugar en las noches menos indicadas .

Esta noche ha vuelto la  mente del mono. Ni siquiera había llegado a dormirme, cuando ya me espabilé definitivamente. La cotorra enjaulada en su máximo esplendor. Imparable.
 Se me ocurrió algo que todavía no había probado con esto de la “pensarrea”:
¿Qué hace uno con los productos de la diarrea? Se deshace de ella en el inodoro ¿no? Pues al inodoro me fuí (para no molestar con la luz, la verdad), y volqué en el papel todo lo que estaba pasando por mi cabeza con el mismo desorden y desconcierto con el que pasaba.
 No, no era una lista de tareas como otras veces, ni una lista de “no se me olvide mañana”. Esta vez escribí  imitando a mi propia mente, claro que a menor velocidad.
Transcribo aquí un fragmento no con el objeto de que se lo lea nadie,  pues apesta (como corresponde a  un subproducto pensarreico), sino para que veáis  a que tipo de monólogo me refiero. Aunque supongo que quien mas quien menos, todos tenemos alguna vez una “pensarrea”.

Me acuerdo de la discusión de mi hijo de ayer con el hijo de V., ¿he sacado la ropa para mañana?, debería comprarme otro jersey marrón que el que tengo está viejísimo, hoy hemos regañado demasiado a los niños, culpabilizamos mucho ¿de donde  viene esto? , me siento culpable, las 12 y media, ¿qué hacemos por fin con el cumple del niño?, que no se me olvide entrar en internet para bajar el bono descuento, la verdad es que el hijo de V. siempre le anda pinchando,¿dormirá hoy toda la noche la niña sin pesadillas?, ya es la una, lo mismo se depierta a la 1 y media y ya no dormimos mas hasta las 4 o las 5, si ya me hubiera dormido, al menos llevaría algo de descanso en el cuerpo, ¿y el blog? ¿a quien le importa?, cada uno tiene lo suyo, el viernes de retiro espiritual que no se me olviden las zapatillas, qué bueno el viaje que han hecho M. y M., ¿podríamos irnos de viaje en enero?, ya me quedan menos de 5 horas para dormir, mañana mala cara, me tengo que comprar un maquillaje que arregle eso…
           

Pues lo curioso ha sido que, como si de un entripado se tratara, ha sido soltarlo y quedarme como nueva. ¡Me he dormido como un cesto!
Si alguien lo prueba, por favor que me lo cuente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario